Plaza del Ayuntamiento antes de la remodelación |
Este
título lo tengo presente desde que leí la biografía de Alfonso XII, cuándo el Duque de Sesto y Marques de Alcañiz,
el cual era Mayordomo Real del monarca anteriormente mencionado decía, “si
tienen alguna duda sobre algún tema, pregunten a los exiliados de marras, esos lo saben todo”.
La verdad que en nuestras Hermandades y
Cofradías tenemos exiliados de marras de sobra, tantos, que superan el número
de cirios de nuestras cofradías, siendo sin querer queriendo los verdaderos culpables
de que nuestra religiosidad no ocupe el lugar correspondiente que verdaderamente merece.
Con los personajes de marras voy abrir unos cuantos capítulos de algunas propuestas que han
hecho nuestros políticos o dirigentes, o algunos cofrades de buen corazón y que los de marras, han dado la guerra suficiente para que no se
realice. Sé a ciencia cierta, que con el paso de tiempo, siguen en sus trece,
porque para ellos rectificar es de cobardes o lo que es peor, no rectifican porque
no dan más de sí.
Si no
recuerdo mal, a mediados de los noventa, del recién siglo pasado, ganó las
elecciones D. Juan Francisco Megino López, el primer edil del Partido Popular,
así como el tercer edil que tuvo la
ciudad desde que comenzó la democracia. Juan Megino como se le conocía tubo
cariño a las hermandades y cofradías, ayudándolas en todo lo que era posible,
llegando a ser incluso pregonero de la Semana Santa del 1999. D. Juan Megino en su
única legislatura como alcalde, tuvo algunas ideas para el bien de las
cofradías y una de ellas fue proponer a la agrupación de hermandades, el rebajar el
suelo de la plaza del ayuntamiento, o por lo menos, rebajar
el pavimento del arco que da a la calle
Juez.
Pues bien,
las cofradías se lo tomaron como un
disparate por parte del ayuntamiento, como algo fuera de lo normal, la frase de
las tertulias improvisadas eran “para mi hermandad (como si pagara la
contribución y la escritura de la misma), no va a pasar nunca por ahí, con que el Sr. Megino se puede ahorrar el dinero”. Tanto fue así, que no se hizo, es más, me
parece que en la remodelación actual de la plaza, no entra el rebajar el piso
de la misma, así como del arco de la calle Juez.
No
hubiera sido mejor hacer presión todas las hermandades, y cogerle la palabra, para así tener otra arteria más a la hora de realizar estación de penitencia, y no
hablo de poner la carrera oficial en ese enclave, sino de tener abierta otra
arteria. Luego que pase quien quiera, pero lo importante es tener un abanico
grande de posibilidades. Pues no, los de marras fueron los primeros que criticaron
a D. Juan, los primeros en echar por tierra, hasta el punto que hasta que no se
desestimó la idea, no pararon. Amen aprovecho para decir que la Hermandad del
St. Sepulcro, tuvo su recorrido por esta plaza, durante dos años, el cual dejó
de pasar por consejo de la Iglesia Diocesana, ya que pasar por allí, era rendir
culto a los políticos denominados masones. Pero la verdad que se quedaba muy
bonito el paso de la cofradía. Amén de la Cofradía de Estudiantes si no mal
recuerdo en el 1994, así como la
Hermandad de la Caridad en los años que realizaban estación el Sábado de
Pasión.
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