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| Salida procecional de Ntra. Sra. Reina y Madre del Mar Coronada el pasado domingo 25 de agosto, desde el Santuario Conventual de Santo Domingo, O.P. Padres Dominicos. Fotografía: Archivo Diario de Almería. |
De todo
se ha dicho, de todo se ha hablado, han salido matarifes hasta por debajo de
las piedras, yo creo que ha sido la fiestas patronales donde una gran parte de
los capillitas almerienses, han estado bien entretenidos, terminando por ser
los más queridos de Almería, los hijos de Sto. Domingo y los más odiados los
hijos de San Indalecio. Todo lo contrario que a comienzo de los primeros años
de este entrado milenio, donde la Hermandad de la Patrona empezó a darle cobijo
a los hijos de la diócesis. Estoy hablando sobre todo del año del 500
aniversario.
Analizando
lo más cuidadosamente posible, todo lo ocurrido, la verdad que no se tenía que
haber cambiado nada, sino todo lo contrario, seguir potenciándolo, todo por su
puesto para hacer llegar la Fe de Cristo hasta los rincones más incógnitos de
la Diócesis.
Amen,
debo comentar que la Eucaristía tiene valor supremo, por decirlo de alguna
manera llana y simplemente, que una ofrenda de flores, por mucho amor que se
ponga, y mucho cariño, ahí el que diga lo contrario, no lleva ninguna razón,
porque Cristo Jesús instituyó la Eucaristía, no una ofrenda de floral, el que
lo dude que mire los Evangelios Sinógticos. Pero es aquí, la pieza del puzle
que debemos encajar, y que parece que no ha encajado de la mejor manera
posible. La ofrenda floral es cierto que lleva realizándose desde hace unos 30
años, idea de un padre dominico, del cual no se su nombre. La realidad que la
hermandad ha trabajado mucho en la superación de este acto popular, siempre con
una idea evangelizadora, ya que han sido mucho los sacerdotes que han animado
el acto. Pero ahora pregunto, ¿respondía
Almería a dicho acto tal como se merece
la Patrona?, ustedes sitúen el acto excluyendo las hermandades y asociaciones que
por programación de la hermandad van a realizar la ofrenda, pues que nos quedaría,
prácticamente nada, perdonar que sea así de duro, pero si la ofrenda tuviera una
repercusión social que las horas fueran
el doble de lo que son, más que tuvieran que intervenir las fuerzas del orden
público para controlar la masa peregrina, pues la copla hubiera cambiando. El órdinario
de la diócesis se ha aprovechado del asunto porque sabía que solo iba a oír las
voces de unos pocos capillitas exaltados y poco más, ya que más del 95% de la población de Almería,
no sabe ni que se realiza dicho acto. Amén de los antecedentes de haber
suprimido por parte del ayuntamiento el día festivo de la Patrona, y que exceptuando
la caseta de feria la “casilla”, si no mal me equivoco, que estuvo recogiendo
firmas, nadie movió un ápice por recuperar dicho día, hasta la llegada a la alcaldía
de D. Juan Francisco Megino López, que fue un gran impulsador de devolver la
festividad a la Patrona.
Aclarando
esto, decir que D. Adolfo se ha aprovechado de la pasividad del pueblo, y que
sabía el número de personas que movían dicha piedad popular, amén de como dije en una entrada pasada, vivimos en la
sociedad en la que impera el cara dura y del feudo, los cuales saben a ciencia
exacta que ni Almería, ni en otro lugar, no nos engañemos, va ha
ver levantamientos populares masivos. A todo esto hay que comentar la excepción de la Hermandad de la Virgen del
Mar y de los custodios de la Virgen, que han intentado por todos los medios
conservar la tradición. Tradición que si ampara el Derecho Canónico. Y que la
Iglesia se ha valido desde su nacimiento, siendo la tradición el camino que ha
seguido para ir incorporando elementos canónicos y litúrgicos, como por ejemplo
a la hora de elegir la canonicidad de los libros del Nuevo Testamento, y como
este ejemplo pues hay una infinidad más. La iglesia siempre se ha valido de la tradición,
de las costumbres del pueblo para proclamar en un sitio determinado la Buena
Nueva del Maestro Jesús. Traciciones estas que estan recogidas en el Derecho Canónico, las cuales no voy a enumerar porque ni quiero alargar demasiado el artículo, ni tampoco quiero hacer una clase magistrar, pero que se muy bien que las tradiciones y constumbre populares estan recogidas en el Derecho Canónico.
Ahora
bien, si D. Adolfo ha recomendado realizar la función a la Virgen el Día de su
onomástica, rompiendo así una tradición de más de un siglo de historia, en la
que se celebraba la función el domingo siguiente al día de su Patronazgo.
Aludiendo que por lógica debe de realizarse ese día, porque es el más
apropiado. Por consiguiente, la ofrenda floral debe realizarse también ese día
porque no vamos a Felicitarla fuera de su festividad. Aunque este último, solo sea un acto de religiosidad popular. Porque
si lo miramos con los parámetros de la lógica matemática, pues no sale una
falacia (mentira, contrariedad, un sin sentido, etc…), como una casa de grande.
Los
motivos que han dado origen a este órdago por parte del D. Adolfo son los que
todos hemos hablado, inquilla con los padres dominicos, querer dejar marcado
cual es su territorio y cual el nuestro, dejar que lo mismo que ha metido mano
a la Hermandad de la Patrona con el tema de los cultos, lo puede hacer con otra
hermandad, dejar a la vista que la Virgen es del Cabildo Catedral y no de los
Padres Dominicos. Aunque hay que recordar que fue el Cabildo Catedral quien renegó
de Ella. Siendo los Padres Dominicos
quienes la recogieron, la sanearon, la limpiaron del salitre y la colocaron en
el Altar Mayor del Convento de Sto. Domingo. Y desde entonces, difundiendo la devoción
a la Reina de los Mares en todos y en cada uno de los corazones de los
Urcitanos. Resumiendo todo esto es solo una luchar de
protagonismos y de poder por parte del Cabildo Catedral junto con el Obispado y
la Orden de Predicadores.
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