domingo, 20 de noviembre de 2011

D. CARLOS AMIGO VALLEJO, UN CARDENAL CON VOCACIÓN DE SERVICIO Y HUMILDAD

La verdad que para hablar de este hombre, deberíamos hacerlo con mayúsculas, ya que ha sido durante sus más de 25 años de Arzobispo de Sevilla un ejemplo de vida sacerdotal, siendo un fiel reflejo de vida acorde con Cristo. Siendo este uno de los motivos de celos y envidias despertadas en la toda la conferencia episcopal, ya que fueron motivo para paralizar su nombramiento como Cardenal-Arzobispo. 
D. Carlos Amigo Amigo Vallejo, fue durante un cuarto de siglo el padre de todos los sevillanos, así como un icono de la iglesia española, símbolo este anhelado por más de un obispo o cardenal de la Conferencia Episcopal Española, siendo su receta la más sencilla del recetario de la abuela, como la humildad, la sencillez, la naturalidad, y todo esto brotando de un amor alimentado por el propio Cristo. 
Aún recuerdo los comentarios de más de un obispo criticándolo por ir a programas televisivos, siendo estos magazines de temática inocente, filosófica, o de espiritualidad. Lo han criticado por sentarse en la mesa con socialistas y marxistas, como si estas personalidades no tuvieran derecho a poder ser evangelizados, por tratar a la religiosidad popular como elemento activo de evangelización y no como otros obispos que los miran como apestados. Lo han criticado por visitar la cárcel, por sentarse con los pobres a comer, por invitar a los seminaristas hacer pastoral con los enfermos de cáncer, y de sida, con los presidiarios, con los emigrantes, con los más marginados de la ciudad como los habitantes del Bacie, las Tres mil Viviendas, etc…, por abriles las puertas de la Catedral Hispalense a los sin techo durante casi toda la cuaresma del 2006, etc… Por eso Vetusta no podía estar al margen de un hombre que ha sabido estar en su sitio, siendo cada día que pasaba más humilde, y sencillo, todavía me acuerdo cuando fue nombrado Cardenal de la Iglesia de Sevilla y pude apreciar como lo acepto desde lo más profundo de su amor y este amor trasformado en humildad y pobreza. ¿Cuánto tardará la Iglesia en tener un Pastor de estas características?, la verdad que pasaran años sin termino para que Dios envíe a otro siervo de siervos. ¡Gracias D. Carlos por los bendiciones recibidas por usted!.

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