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| Stmo. Xto. del Amor, en el pasado Martes Santo Fotografía y fotomecánica: Emir Jesús Díaz Pérez |
La verdad es que yo no se en realidad lo que es un cantamusa, ya que no se encuentra en el diccionario de la Real Academia de la Castellana, pero sé que para el vocabulario callejero es alguien que no aporta nada a la sociedad, y es que, en el mundo cofrade y en el no cofrade, se cuentan por cientos los cantamusas que nos rodean.
Suelen verse por los cultos de las hermandades, (no a la participación de los mismos), triduos, quinarios, besamanos, vía-crucis, así como en la salida procesional alrededor del paso, con el único objetivo marcado que es el criticar lo que están viendo u oyendo, porque no todas las bandas son del gusto del cantamusa.
Por otra parte, en algunos casos son de los que están picando en varias hermandades, pero sin aportar nada en ellas, o también de los que se dan golpes de pecho ante su hermandad y luego se dejan la vida en la corporación de la mujer o novia, eso sí, cuando sale el tema vuelven a darse golpes de pecho sobre su hermandad.
El cantamusa es un personaje que no lo calificaría de capillita, ya que este, por regla general es positivo, en cambio el personaje que estamos viendo es más bien, negativo, destructivo y más si cabe es con la hermandad que le tiene manía, ya puede hacer la corporación un paso de oro macizo, que el cantamusa dirá que es de metal dorado o ni eso, sino niquelado en ese color.
Pero bueno de todo tiene que haber en la Viña del Señor, y lo mismo que los zánganos son necesarios en la colmena o los mansos en las dehesas de toros bravos, los cantamusa también son necesarios.
