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San Juan de la Cruz
Fotomecánica: Chus Lara |
Hoy en el día de San Juan de la Cruz, en este post, quiero recordar aquellos días que tuvo que sufrir prisión y que le valieron para escribir los poemas de los Versos de la Noche Oscura, algo que ha ido con él desde aquel mismo instante que los redactó.
Por el gran deseo que el Santo tenía de sufri¬mientos, permitió Dios que fuese afligido en su cuerpo y en su espíritu. Cogiéronle preso los Padres Descalzos por haber comenzado la Re¬forma de la Orden y lo llevaron de Ávila a Toledo el 4 de diciembre de 1577, donde por espacio de nueve meses sólo Dios y los ángeles saben lo que con una asombrosa humildad y paciencia sufrió, mereciendo que el Señor mismo y la Reina del Cielo le consolaran y animaran de varios modos. Oigamos lo que a este propósito dice la Santa. «Harta pena me ha dado la vida que ha pasado fray Juan y que le dejasen, estando tan malo, ir luego por ahí. Plega a Dios que no se nos mue¬ra». «Yo le digo que trayo delante lo que han hecho con él, que no sé, cómo Dios sufre cosas semejantes, que aún Vuestra Paternidad no lo sabe todo. Todos nueve meses estuvo en una que no cabía bien con cuan chico es, y ¡ ellos no le dieron para mudarse la túnica, con haber estado a la muerte». «Procure Vuestra Paternidad que le regalen en Almodóvar, se de allí, por hacerme a mi merced, y no se descuide avisarlo: mire no se olvide. Yo le que quedan pocos a Vuestra Paternidad como él si se muere». (Santa Teresa en carta al Padre Gracián). Estando en esta prisión compuso los versos de la Noche Oscura y los del Cántico Espiritual que después comentó él mismo en Granada
Salió de aquella cárcel por indicación y con la ayuda de la Santísima Virgen en 1578, pasan¬do de allí al Convento del Calvario de Andalucía para gobernarle con título de Vicario.
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