Voy hacer de abogado del diablo, partiendo una lanza a favor de la ley del aborto, dejando muy claro que soy totalmente contrario a la ley del aborto, me parece de las más repugnantes edictos que ha aprobado el Gobierno, pero como he dicho antes, hago de abogado del diablo.
En primer lugar voy a decir que la ley está aprobada por el Congreso y como tal es legal abortar en los plazos y edades previstas por el Gobierno, pero sinceramente la responsabilidad recae sobre la mujer en la decisión de abortar o no, la ley la debe aplicar cada uno en su conciencia con la responsabilidad que eso conlleva, es cada uno, el que tiene que responder ante su moral lo que debe o no debe hacer. El Gobierno no obliga abortar, tan solo pone a disposición para aquellas personas que dentro de su conciencia tiene cabida tal opción, pues será ella, quién por su propia voluntad paralice los designios de la creación, como también será ella quien responda luego ante su conciencia.
Y por último, decir que la ley si se mira desde el punto vista social, se puede ver como un derecho que beneficia a los pobres, porque cuando una niña de clase trabajadora se queda embarazada, es una tragedia familiar tanto social, moral y económico, en la gran mayoría de los casos antes de la ley, las chavalas tenían que ponerse a trabajar en lo primero que pillaban o mal casarse con el hombre equivocado, y en le peor de los casos, poner en la manos de un matarife para poder interrumpir la gestación. Mientras las niñas de papá se iban a Londres abortaban antes de que se notara la barriga, no enterándose nadie de ese paso mal dado, pudiendo seguir disfrutando de su juventud, así como continuar con sus estudios o trabajo.
Terminada la exposición, vuelvo a reiterar lo dicho al principio del texto, que estoy a favor de la vida, el aborto me parece que hace a la sociedad más denigrante, prohibiéndole a esta la calidad de ser humano, y comportarnos peor que los animales, ya que con estas leyes, no llegamos ni a la categoría de animales.
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